Las bodegas de producción ubicadas en todo el Marco de Jerez piden usar el sello de calidad de la DO Jerez-Xérès-Sherry.
Que no se limite al triángulo Jerez de la Frontera, El Puerto de Santa María y Sanlúcar de Barrameda como ocurre actualmente. «Un sistema que carece de sentido ya que todos los productores tienen que elaborar y cumplir con los mismos requisitos que establece el pliego de condiciones«, recalca el presidente sectorial del vino en Cooperativas Agro-alimentarias de Cádiz, Francisco Lorenzo Gallegos. Salvo las diferencias geográficas, el presidente del Consejo Sectorial de Vino en Cádiz sostiene que las bodegas de fuera del triángulo de crianza «producen unos vinos igualmente extraordinarios«. Así lo avalan los innumerables premios concedidos a estos caldos, como el reconocimiento internacional Gran Bacchus de Oro otorgado hace unos días a la cooperativa Católico Agrícola de Chipiona por su Moscatel ‘Los Madroñales’.
Sin embargo, los productores gaditanos, al igual que en el resto de la región, se aquejan de unos precios insuficientes, a pesar de estar amparados por la DO, lo que pone en riesgo el mantenimiento de la rentabilidad de las viñas. Este es uno de los motivos por los que la federación considera fundamental impulsar la integración de las cooperativas vitivinícolas para ganar dimensión y ser más fuertes ante los mercados. Por este motivo, Francisco Lorenzo Gallegos señala la necesidad de trabajar para «obtener mayor rentabilidad en la viña y hacer el sector atractivo para los jóvenes«.